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La representante de Entreculturas recuerda que “2,5 millones de los migrantes en el mundo son de nacionalidad española”
La coordinadora de Migraciones de Entreculturas, Cristina Manzanedo, aseveró durante la mesa redonda “Movilidad Humana: Perspectivas”, que se celebró en la sede central de Radio ECCA durante la mañana de hoy, que “la idea de que toda África está viniendo a Europa es una mirada distorsionada, probablemente motivada porque la mirada de Europa en materia de migración se queda en el Mediterráneo, olvidando a las personas que ya están entre nosotros y nosotras y lo que ocurre más allá de nuestro territorio”.
Manzanedo —que compartió la mesa con Rita Belén Gil, secretaria y coordinadora de El patio de las culturas, y las alumnas de ECCA María Teresa Rozo y Marina Rivero—, recordó que “son dos millones y medio los migrantes que están por el mundo y que tienen nacionalidad española”.
En su exposición, la idea que más destacó es que “las migraciones son la consecuencia de no ver al mundo como la casa común”. En este sentido explicó que “70 millones de millones de migrantes lo son forzados por guerras, pobreza y cambio climático”, y criticó que no exista el “derecho a no migrar como existe el de migrar”.
A su juicio, “no se puede hablar de migración sin ver cómo nos relacionamos con el resto del mundo. La pregunta que hay que contestar es qué mundo queremos para vivir”, y apostilló que “habrá que definir cuánto estamos dispuesto a sacrificar o cuál debe ser el compromiso con la casa común”. En este contexto aseveró que “la migraciones no pueden pararse, no se resuelven en las fronteras, pero sí se pueden gestionar si nos comprometemos”, señalando que “la solidaridad de Europa se está poniendo a prueba”.
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| Mesa redonda «Movilidad humana: perspectivas». |
Tanto Rozo como Rivero destacaron la importancia de facilitar la integración y relataron las dificultades que supone para cualquier persona “meter toda tu vida en una maleta y partir de cero en un país en el que las costumbres y la forma de relacionarse es distinta”.
Por su parte, Rita Belén Gil hizo especial hincapié en la educación y formación de las generaciones que “teniendo otras raíces, son españoles igualmente”, afirmando que “serán nuestras y nuestros presidentes de asociaciones, jefes, compañeros y compañeras de trabajo, vecinos y vecinas…. Y dejarles fuera de la educación o la cultura supondrá crear una brecha cultural con consecuencias para el futuro”.
